Higiene mental
Higiene mental: conoce los hábitos para cuidar tu mente y mantener una buena calidad de vida
Sociedad Alto rendimiento Salud
La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) es clara: "La salud mental es parte integral de la salud, tanto que sin ella no hay salud". Vivir en un mundo cada vez más cambiante pone a prueba nuestro bienestar psicológico y para preservarlo solo hay un camino: cuidar nuestra higiene mental. A continuación, explicamos cómo ayuda a prevenir conductas negativas, a alcanzar el equilibrio emocional y a mejorar nuestra calidad de vida.
En una sociedad marcada por constantes cambios económicos, sociales y hasta sanitarios, el desgaste psicológico representa una carga significativa en la vida de millones de personas. Según advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS) en un informe sobre la salud mental en el mundo, cerca de 1.000 millones de individuos en nuestro planeta sufren algún trastorno mental como cuadros frecuentes de ansiedad o depresión. En este contexto, la impactante cifra destaca la necesidad de abordar la cuestión de la higiene mental como algo prioritario de cara a las próximas décadas.
Qué es la higiene mental o psicológica
Las consecuencias psicológicas de enfrentar una carga constante de ansiedad, depresión y estrés ponen de relieve la necesidad de mantener el bienestar a través de la higiene mental. Esta práctica médica, iniciada por el psiquiatra estadounidense Clifford Whittingham Beers allá por 1909, define el conjunto de hábitos que permiten a una persona gozar de salud mental y estar en armonía con su entorno sociocultural. Las conductas que abarca tienen como objetivo prevenir comportamientos negativos, aportar estabilidad emocional e incrementar la calidad de vida.
Una buena salud mental nos capacita para aprender, razonar, relacionarnos, producir, lidiar con las dificultades y ofrecer nuestra mejor versión, por poner algunos ejemplos. Por ello, la ONU y la OMS advierten que su deterioro supone un grave problema social y económico: tan solo la depresión y la ansiedad causan una pérdida de 12.000 millones de días de trabajo cada año a nivel global, lo que provoca unas pérdidas anuales de casi 1 billón de dólares a la economía mundial.
Importancia de la higiene mental
En un mundo actual golpeado por crisis humanas y sanitarias donde cerca de 280 millones de personas sufren depresión, tal y como indica la ONU, la salud mental se ha convertido en una cuestión prioritaria para los gobiernos. La propia ONU considera urgente reforzar los servicios de atención psicológica ante los datos alarmantes que llegan de algunos países, que registran tan solo dos trabajadores especializados en salud mental por cada 100.00 habitantes.
En estos tiempos difíciles, la higiene mental resulta clave para proteger a los sectores más vulnerables de la sociedad, como los jóvenes. En el mundo, uno de cada siete jóvenes (14 %) de entre 10 y 19 años padece algún tipo de trastorno mental, un tipo de problema que corresponde aproximadamente a un 13 % de la carga global de enfermedades en esta franja de edad. Conviene no pasar por alto estos datos, ya que el suicidio es la cuarta causa global de mortalidad en personas de entre 15 y 29 años de edad.
VER INFOGRAFÍA: La salud mental en tiempos de crisis e incertidumbre [PDF] Enlace externo, se abre en ventana nueva.
Consejos y hábitos de higiene mental
La higiene psicológica empieza por uno mismo y todos deberíamos velar por nuestras emociones, como recomienda la OMS. En este sentido, los expertos en salud mental coinciden en la necesidad de adoptar una serie de hábitos para el autocuidado emocional:
Cubre tus necesidades básicas
Lo primero que debemos hacer para sentirnos bien es satisfacer nuestras necesidades fundamentales, como comer o dormir adecuadamente. Son claves para el bienestar psicológico y no debemos descuidarlas.
Cuida tu autoestima y aprende a confiar
Para gozar de una buena higiene mental es importante que nos aceptemos tal y como somos. Además de tener fe en nosotros mismos, también es importante tener fe en los demás.
Gestiona tus emociones y cultiva el autocontrol
No se trata de obviar nuestros sentimientos ni de dejarnos llevar por ellos, sino de saber identificarlos, interpretarlos y modular su intensidad para actuar de forma correcta. Para ello, es clave la inteligencia emocional.
Maneja las expectativas y establece objetivos concretos
Mantener la motivación y ser perseverantes es fundamental para superarnos a nosotros mismos, por ello debemos fijarnos metas alcanzables para no desanimarnos. No hay que renunciar a los sueños, pero sí saber manejar expectativas y realidad.
Piensa en positivo y vigila las emociones negativas
En ocasiones, es inevitable que nos asalten las dudas y los temores, pero siempre podremos contrarrestarlos y limitar su alcance con pensamientos positivos.
Aprende a relajarte y a tolerar la adversidad
El estrés es una reacción natural del organismo muy útil para rendir en situaciones adversas. Sin embargo, resulta muy dañino para la salud cuando se normaliza y debemos aprender a desconectar. Por ejemplo, a través de técnicas como el mindfulness.
Alimenta tu vida social y apóyate en los demás
Los seres humanos somos sociales por naturaleza y necesitamos relacionarnos con otras personas para divertirnos y compartir nuestras preocupaciones.
Realiza deporte con regularidad
Hacer ejercicio de forma regular ayuda, además de a mantener la forma física y reforzar nuestra salud, a despejar la mente. Los periodos de descanso tras el deporte también son importantes.