El impulso del vehículo eléctrico en EEUU

El objetivo es ambicioso. El gobierno de EEUU, encabezado por el presidente Joe Biden, pretende que los vehículos eléctricos representen la mitad de las ventas de automóviles nuevos en 2030 y que solo se vendan modelos “cero emisiones” en 2035.

El despliegue del automóvil eléctrico en el país ha evolucionado favorablemente en los últimos años aunque aún queda mucho camino por recorrer. En el este, en concreto en Maine, Connecticut y Nueva York, Avangrid (la filial de Iberdrola en EEUU) está fomentando una nueva infraestructura de recarga mediante descuentos a empresas y municipios, mientras que en el oeste, se encuentra la mayor producción de petróleo del país. 

Solo el 1 % de los 22 millones de vehículos registrados en Texas son eléctricos. Pero la cifra está aumentando y la concepción de la población se dirige cada vez más hacia una movilidad sostenible. En el otro lado del espectro está California, que cuenta con el mayor número de vehículos eléctricos y estaciones de carga del país: el 16 % de los coches vendidos son eléctricos.

La electrificación de las carreteras en EEUU afronta diferentes obstáculos, desde un abastecimiento finito de piezas de batería hasta el reto de ganar la confianza de la población y hacerle perder el miedo a recorrer grandes distancias con vehículos eléctricos.

Avangrid se ha unido a una coalición de más de 60 empresas eléctricas para desarrollar una red de estaciones de recarga rápida a lo largo de las principales carreteras de 48 estados. La inversión de 3.700 millones de dólares garantizará la energía para los conductores de largo recorrido y preparará el camino para los 22 millones de vehículos eléctricos que se prevé que lleguen a las carreteras estadounidenses a finales de la década.

Fuente: FT