Compra a granel
La compra a granel, ¿una solución para reducir el consumo de plásticos?
La compra a granel ha resurgido para frenar el despilfarro de alimentos y la invasión de envases de plástico en la naturaleza. Este tipo de comercio, habitual hasta hace unas décadas, permite adquirir comestibles y bienes domésticos al peso y sin embalajes, y se ha convertido en uno de los pilares del movimiento global Residuo Cero.
Los recipientes de usar y tirar inundan los supermercados, al igual que las montañas y los océanos. Las bandejas de poliestireno, las botellas de PET, los tetrabriks o los envases de plástico son ya parte habitual del paisaje: se calcula que en la actualidad hay cerca de 140 millones de toneladas de residuos plásticos en los océanos, mares y ríos del mundo, según un estudio científico publicado en 2022 por la OCDE.
La mayoría de estos residuos procede de tierra firme, como los casos de objetos de plásticos que llegan al mar desde vertederos, a través de las corrientes de agua que fluyen por los mismos. Según Greenpeace, el 80 % de los residuos que acaban en el océanos vienen de tierra firme, mientras que el 20 % restante proviene de la actividad marítima.
Una alternativa para vivir sin plásticos
Esta situación ha dado lugar al nacimiento de iniciativas como Residuo Cero (Zero Waste), un movimiento internacional que promueve el consumo responsable y la reutilización con el objetivo de reducir al máximo el número de desechos en los hogares. La iniciativa nació en el blog personal de la francesa Bea Johnson, que pone el foco en la disminución del uso de plásticos a través de acciones cotidianas como el uso de tarros de cristal y bolsas de tela, o la compra a granel.
Otra iniciativa de éxito es Food in the nude. Puesta en marcha en Nueva Zelanda, nació con el objetivo de poner fin al envasado con plásticos de los productos frescos en los supermercados. Los productores alimenticios firmaron una declaración por la cuál se comprometen a hacer que todos los envases y etiquetas sean 100% reutilizables, reciclables o compostables en 2025. Según el diario NZ Herald, las ventas de algunas hortalizas se dispararon hasta en un 300 % en aquellos establecimientos que abandonaron los envases de plástico.
Un par de pepinos, cuatro tomates o una cebolla envueltos con plásticos sobre una bandeja de PVC. El descontento de los clientes ante este tipo de packagings ha provocado el boom de un tipo de consumo que consiste en adquirir alimentos y bienes domésticos sin embalaje. A diferencia de los productos envasados, que nos obligan a comprar la cantidad establecida por el fabricante, la compra a granel es más flexible y nos da libertad para decidir cuánto vamos a comprar. El consumidor acude a la tienda con sus propios recipientes o bolsas reutilizables y se lleva solo lo que desea, ya sea por peso o por unidad.
Productos a granel: Qué comprar y dónde
Muchos de los alimentos que incluimos en la lista de la compra se pueden adquirir sin envase. De hecho, cada vez más establecimientos ofrecen a sus clientes esa posibilidad. A continuación, repasamos qué se puede comprar y dónde:
Frutas, verduras y hortalizas
Las fruterías de barrio y los mercados de abastos suelen venderlos al peso. Esta es la práctica habitual también en numerosos supermercados.
Cereales, pastas y legumbres
En los supermercados suelen venir envasados. Para conseguirlos al peso tendrás que recurrir a tiendas de productos ecológicos o probar en alguna tienda de barrio.
Carnes, pescados y embutidos
Es muy sencillo encontrarlos a granel, tanto en tiendas de barrio —carnicerías, pescaderías y charcuterías— como en los supermercados y los mercados de abastos.
Pan y bollería
Las panaderías y las pastelerías de barrio ofrecen estos productos a granel. Una opción que cada vez brindan más supermercados.
Aceite, cerveza, vino y leche
En muchas almazaras, bodegas, granjas, ferias, mercados de abastos y comercios especializados venden estos productos por litros.
Las ventajas de comprar a granel
La compra a granel es una opción de consumo responsable en auge por los numerosos beneficios que ofrece, tanto para nosotros mismos como para el medio ambiente:
- Adquirimos la cantidad necesaria de cada producto. Así ahorramos dinero, consumimos alimentos más frescos y desperdiciamos menos comida porque sobre o se ponga mala.
- Reducimos el número de envases o plásticos de un solo uso que terminan en vertederos o diseminados por la naturaleza. Según el Banco Mundial, cada persona genera 0,74 kg de residuos sólidos al día.
- Mejoramos nuestra alimentación porque los productos a granel son más naturales y tienen menos aditivos perjudiciales para la salud.
- Seleccionamos los alimentos de mejor calidad. Las bandejas de fruta y verdura, por ejemplo, son indivisibles y no permiten descartar las unidades en peor estado.
- Contribuimos al comercio y la agricultura local. Los alimentos a granel más comunes provienen de granjas y cultivos cercanos, lo que facilita conocer la procedencia de lo que consumimos.
- Ahorramos dinero (si sabemos dónde comprar). Algunos lugares que venden a granel suelen ser más caros, pero nos ahorramos pagar por el envasado y evitamos adquirir cantidades innecesarias.