Empleo
La compañía tiene un gran impacto en el mercado laboral de los países en los que está presente: ha contribuido a crear 425.000 empleos en todo el mundo (40.721 de ellos son directos y el resto, indirectos e inducidos), según los datos del Informe de diversidad de Iberdrola, realizado con los datos al cierre del Ejercicio 2022.
Creamos empleo estable y de calidad
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Nuevas contrataciones
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Horas anuales de formación por empleado
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Puestos de trabajo generados a nivel mundial
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Seguridad de los empleados: reducción del ratio de accidentabilidad (vs 2021)
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Iberdrola es un fuerte multiplicador de empleo: por cada trabajador que contrata de forma directa genera nueve empleos más de manera indirecta —empleos que crean las empresas y sectores que captan el gasto y las inversiones realizadas por el grupo y por sus proveedores— o inducida —puestos de trabajo creados en el conjunto de los sectores económicos gracias a la actividad económica generada por la compañía—.
En 2022, Iberdrola ha seguido promoviendo la creación de empleo de calidad, con 4.696 nuevas contrataciones, además de más de 1.970 becas e incentivos educacionales. Con ello, la plantilla supera las 40.000 personas, dato al que hay que sumar las otras 390.000 a las que Iberdrola da empleo a través de su actividad en todo el mundo. La compañía ha seguido favoreciendo, asimismo, el desarrollo profesional y la especialización de todo el equipo humano, con más de 1,5 millones de horas de formación impartidas —47 horas por empleado, cuatro veces más que la media europea— y 2.700 promociones internas.
Políticas y compromisos con el empleo
El Grupo Iberdrola está compuesto por un equipo global, multicultural, comprometido y cualificado que contribuye, con su trabajo y talento, a la creación de valor sostenible.
Las políticas definidas para la gestión de los recursos humanos integran las pautas que rigen las relaciones laborales en las diferentes sociedades del grupo y sirven de referencia para definir los objetivos de la sociedad en materia de empleo: la preservación de las garantías laborales y la relación estable con los trabajadores; el fortalecimiento de los aspectos de seguridad y salud en el trabajo y formación; la protección de la diversidad y de la igualdad de oportunidades en el acceso al empleo; el impulso del desarrollo profesional; y la promoción entre su plantilla de comportamientos y actitudes acordes con los principios éticos.