El uso del plástico reciclado en la construcción de obra civil
El puente de plástico reciclado más largo del mundo, en Escocia
El plástico es dañino para el medio ambiente porque no se degrada: una botella de PET puede tardar más de cinco siglos en descomponerse. Pero, ¿y si se pudiera convertir esa característica nociva en una ventaja? Bajo esa premisa investigadores de la Universidad de Rutgers, en Estados Unidos, han creado un material termoplástico 100% reciclado y reciclable que tiene múltiples usos en construcción. El material se utilizó para construir el puente de plástico reciclado más largo del mundo en el condado de Peeblesshire, en el Escocia.
El río Tweed es conocido principalmente por el tejido que toma su nombre y por atravesar la región que denominan Scottish Borders. Pero es, también, pionero en el aspecto medioambiental: atraviesa sus aguas el llamado puente de Easter Dawyck, el más largo construido en el mundo con plástico reciclado. Un puente que, además, ha servido para reciclar 50 toneladas de residuos, soporta el paso de vehículos de hasta 44 toneladas y es 100% reciclable.
El puente —cuyo aspecto no se diferencia de los tradicionales de la zona— fue montado por un contratista local de Peeblesshire en un tiempo récord: dos semanas para las columnas y apenas cuatro días para las vigas. Tres en total de nueve metros de largo, hasta crear una estructura de 30 metros de longitud de un material ligero y muy estable que no se corroe, no se oxida, no requiere pintura ni ningún tipo de tratamiento ni mantenimiento.
Que un puente de tan innovadoras características se encuentre en medio de la campiña escocesa, cerca de la pequeña localidad de Pebbles (menos de 9.000 habitantes según el último censo), es resultado de la labor de dos actores principales. Por un lado, el Centro de Materiales Avanzados de la Universidad norteamericana de Rutgers. Y, por otro, dos empresas, una a cada lado del Atlántico, que apostaron por el uso del plástico reciclado en la construcción de obra civil.
VER INFOGRAFÍA: El puente de Easter Dawyck [PDF]
Material de construcción reciclado y sostenible
El proyecto del puente de Easter Dawyck, concebido por Vertech Ltd y con el apoyo del Gobierno de Gales, ha sido posible gracias a una colaboración entre la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Cardiff y la Universidad de Rutgers, que ha desarrollado el material termoplástico que denominan en inglés structural plastic lumber, algo como madera plástica estructural.
La creación es el fruto del trabajo del equipo del profesor Thomas Nosker, investigador principal del Centro de Materiales Avanzados de la mencionada universidad, que vio la posibilidad de transformar las desventajas del plástico en características tremendamente positivas a la hora de utilizarlo en la construcción de estructuras. Y, todo ello, partiendo desde una base: que el material sería siempre reciclado.
Los comienzos de la investigación del equipo del profesor Nosker se basaron en utilizar polietileno de alta densidad reciclado, que se usa en la fabricación de envases, como sustitutivo de la madera tratada en la construcción de elementos pequeños como bancos de jardín. Sin embargo, el problema principal era que las planchas de polietileno reciclado no eran suficientemente resistentes y se estropeaban con el uso repetitivo y prolongado. Fue la combinación de ese material con poliestireno y otros plásticos de mayor rigidez en una proporción óptima la que supuso un salto cualitativo: el resultado es un material de una dureza que lo hace perfecto para la construcción de estructuras, más duradero que la madera, que no requiere ningún tipo de mantenimiento y cuya utilidad va mucho más allá de la construcción de bancos de parques. Y es, por supuesto, totalmente reciclado y reciclable.
Puentes y otras estructuras de material reciclado
El material resultante de esa combinación es tremendamente moldeable en caliente, por lo que puede adoptar cualquier forma, lo que hace que las posibilidades sean infinitas en su utilización en obra civil: traviesas para vías de tren, estructuras de puentes, vigas y columnas para usos diversos... La colaboración entre el profesor Nosker y la empresa privada se ha traducido, en Estados Unidos, en una serie de patentes que conjugan el uso del material y especificaciones técnicas estándar, de manera que los costes de las estructuras son notablemente reducidos al fabricarse piezas de longitudes y grosores determinados que se ensamblan in situ.
Así, y antes del salto a Europa, la madera plástica estructural y esta eficiente técnica constructiva ya habían sido utilizadas en la construcción de cinco puentes en Estados Unidos, de menor longitud que el de Peeblesshire, que supone un hito en la obra civil y aúna todas las características ventajosas del uso de este material sostenible. Los beneficios a nivel medioambiental son claros: su fabricación permite reciclar toneladas de plástico que de otro modo serían enterradas o acabarían en vertederos, a la vez que es totalmente reciclable.
Reino Unido afronta, al igual que el resto del mundo, la batalla contra el plástico, e iniciativas como la utilización de materiales sostenibles en la construcción de estructuras son solo uno de los ejemplos de esta lucha. El gobierno escocés fue pionero en la prohibición del uso de plásticos de un solo uso, como pajitas, no permitidos a partir de finales de 2019. Los escoceses también fueron los primeros en cobrar las bolsas de plástico en los supermercados, y su ratio de reciclaje es de los más altos de Europa. El cambio en la legislación referente a las estructuras de obra civil como puentes —el de Easter Dawyck se encuentra en terreno privado, lo que hizo posible su construcción con este innovador material— o vías de tren, de forma que puedan utilizarse materiales sostenibles, también está en marcha.