Diseño circular

Diseño circular: cómo repensar el proceso de creación y apostar por la sostenibilidad

Transformación social

El diseño circular va de la mano de la economía circular, que apuesta por la reutilización de los productos y el abandono del paradigma de usar y tirar. En concreto, esta forma de diseño aboga por repensar el proceso de creación de un producto desde el inicio y, para ello, los diseñadores deben adoptar la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente como punto de partida.

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El diseño circular tiene como objetivo principal la protección del medio ambiente.

El concepto de economía circular nace en los años 80 como contraposición a la economía lineal —la del paradigma de usar y tirar—, cuando empezó a constatarse que ese sistema de producción y consumo sustentado en la sobreexplotación de recursos naturales finitos era cada vez más insostenible para el planeta. En la actualidad, esta forma de economía está en auge y puede ser fundamental en la lucha contra el cambio climático.

La Fundación MacArthur, una de las principales impulsoras del modelo circular, lo define como "una alternativa que busca redefinir qué es el crecimiento, repercutiendo en beneficios para toda la sociedad y, especialmente, para el medio ambiente". Se basa en varios principios, pero uno de ellos hace énfasis en la importancia de reducir los niveles de contaminación y residuos desde el diseño. Ahí entra en escena el concepto de diseño circular.

Qué es el diseño circular

El diseño circular se centra en crear productos y servicios para la economía circular, de ahí su estrechísima vinculación. La clave reside en repensar el proceso desde el inicio, de manera que la materia, como los propios procesos biológicos, tenga un ciclo de vida regenerativo en pro de la sostenibilidad del planeta, es decir, que vuelva a ser útil una y otra vez siendo reparada, reutilizada, reciclada o transformada.

Tal y como explica Tim Brown Enlace externo, se abre en ventana nueva., director ejecutivo de la firma de diseño norteamericana IDEO y uno de los principales impulsores del design thinking, el diseño circular conlleva diseñar los productos y sus componentes desde el inicio con una mentalidad circular. Por ejemplo, en el caso de un aparato tecnológico, consistiría en pensar desde el arranque en cómo recircular los valiosos materiales que contiene, de manera que puedan ser reaprovechados de distintas maneras una vez concluida la vida útil del aparato.

Principios del diseño circular

Según The Circular Design Guide, una iniciativa de la Fundación MacArthur junto a IDEO, los principios del diseño circular son:

 Entender

Obtener información sobre las diferentes soluciones de diseño circular y alcanzar una comprensión más profunda sobre cómo se puede pasar del pensamiento lineal al circular.

 Definir

Articular un desafío, encontrar las oportunidades para la circularidad, tanto si se está empezando un proyecto como si se está revisando uno existente, y establecer metas.

 Hacer

Comprender las necesidades de los usuarios, intercambiar ideas, desarrollar conceptos, hacerlos tangibles con la construcción de prototipos y testarlos para aprender.

 Lanzar

Poner el concepto en el mercado con el fin de recopilar comentarios que permitan hacer evolucionar el producto o servicio y generar los cambios que sean necesarios.

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Los métodos del diseño circular.

 VER INFOGRAFÍA: Los métodos del diseño circular [PDF] Enlace externo, se abre en ventana nueva.

Beneficios del diseño circular

La apuesta por el diseño circular tiene una serie de ventajas que, en última instancia, repercuten en el bienestar del medio ambiente:

  • Minimiza el consumo de recursos y la generación de residuos. Tan importante es la elección de materiales sostenibles, como la reducción del consumo de energía, agua y demás recursos que se utilizan durante su fabricación y posterior uso, así como el volumen de desperdicios generados.
  • Optimiza la producción y la logística. La idea es reducir las emisiones contaminantes lo máximo posible durante estos procesos, por ejemplo, incluyendo criterios de proximidad en la elección de los proveedores.
  • Alarga la vida útil de los productos. Al contrario que la cultura de la obsolescencia programada, especialmente dañina para el medio ambiente, este tipo de diseño apuesta por materiales duraderos y resistentes.
  • Impulsa la concienciación con la sostenibilidad. Los productos diseñados de esta forma cada vez son más demandados por una sociedad preocupada e implicada en la protección de la biodiversidad y en la lucha contra el calentamiento global.

Ejemplos de diseño circular

Fabricar envases biodegradables, como los desarrollados a partir de micelio —estructura radicular de los hongos— de la empresa Ecovative, facilitar la reparación de los productos, como hace la marca de ropa Patagonia para arreglar y reutilizar sus prendas, o apostar por la modularidad de los componentes tecnológicos para que su actualización y reciclaje sea viable y sencillo, como el caso de los teléfonos de la compañía Fairphone. Estos son solo algunos ejemplos del impacto del diseño circular.

Pero no solo las empresas más pequeñas apuestan por este modelo. Por ejemplo, Nike, inspirándose en la Global Fashion Agenda, creó Circularity: Guiding the Future of Design Enlace externo, se abre en ventana nueva., una guía en la que comparte una serie de principios para potenciar la sostenibilidad en la industria textil. Porque, en palabras de John Hoke, director de diseño de la multinacional, "el diseño tiene la oportunidad de asumir un papel importante para hacer del mundo un lugar mejor".

El modelo de propiedad de determinados bienes y productos, menos conocido pero cada vez más valorado, es otra alternativa que gana terreno. Philips es un buen ejemplo de ello. En algunos proyectos arquitectónicos la multinacional holandesa no vende sus productos, sino que asume ella misma la iluminación del edificio a cambio de un pago regular, asegurando así un consumo y mantenimiento sostenibles.

Modelo de economía circular en el Grupo Iberdrola 

En Iberdrola trabajamos para ser más respetuosos con la naturaleza en nuestras tres áreas estratégicas de sostenibilidad: acción climática, protección de la biodiversidad y economía circular.

Por ello, nuestro modelo de negocio sostenible se basa en el modelo de economía circular, un sistema de aprovechamiento de los recursos en el que prima la reducción del uso de nuevas materias primas a través de la eficiencia en procesos, las extensiones de vida de los productos y la apuesta decidida por la reutilización y reciclado de materiales.